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El 26 Salón Internacional del Cómic abre sus puertas y muestra la buena salud por la que atraviesa el sector. Más de un centenar de editores nacionales e internacionales exponen en esta edición del Salón Internacional del Cómic de Barcelona, en donde no sólo se presentan las novedades de libros de historietas, sino que también se homenajea a las tradicionales figuras de este género cada vez más popular.
La inauguración de la feria contó con la presencia de la clase política, que después de un recorrido por el recinto ferial, coincidieron en destacar en gran boom que está experimentado la industria del cómic en estos momentos, después de los altibajos que sufrió en el pasado.
El conseller de Cultura de la Generalitat de Catalunya, Josep Manuel Tresserres, destacó el espíritu artesanal del cómic y su aplicación en el mundo industrial no sólo editorial, sino de las nuevas tecnologías, que hacen que este género se haya convertido un referente para las nuevas generaciones.
“La gente joven busca instrumentos culturales que tengan versatilidad, y las posibilidades del grafismo y la creación de imágenes son enormes¨, indicó Tresserres, quien también consideró que el cómic es un “banco de pruebas” para otros sectores de la cultura.
Tresserres anunció que la Generalitat aprobaría en los próximos quince días la creación de un Premio Nacional del Cómic y que trabajaría duro para edificar un Museo del Cómic en el área de Barcelona, que albergue una recopilación de la historia gráfica desde las aucas, pasando por la prensa satírica, la manga, las viñetas y los tebeos.
El director general del Libro del Ministerio de Cultura español, Rogelio Blanco, reiteró el auge que el cómic, con un millón de ejemplares publicados al año, está teniendo en la industria editorial en España, que ya es la cuarta potencia mundial y que representa un 1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
“El cómic es un tipo de creación humano que constituye otra forma de leer la realidad”, indicó Blanco, quien resaltó la necesidad de que en España se creen más comitecas ante el increíble aumento de la demanda por parte de los lectores y aficionados.
El alcade de Barcelona Jordi Hereu, también participó en el acto de apertura de la feria, y dijo estar sorprendido al ver que los visitantes a esta 26 edición son gente de todas las generaciones y por la dimensión internacional de los exhibidores.“Es una buena noticia para el mundo del libro. El cómic se ramifica de muchas formas….Si el cómic té salud, la cultura també te salud”, resaltó. Baleares ha sido en esta ocasión la comunidad autónoma invitada de honor en el Salón, que ha venido a Barcelona con una delegación encabezada por Maria Angeles Leciñera, consellera de Interior del Gobierno Balear.
La política dijo que los visitantes se sorprenderán de la fuerza y vitalidad del cómic balear con autores como Max, Pere Joan, Rafael Vazquez, y otros noveles com Tomeu Seguí entre otros, que forman parte de la exposición ¨Cada dibujante es una isla¨que se puede ver en el recinto ferial.
“Queremos que Baleares sea un referente en el mundo del cómic. Por eso es importante dar a conocer la historia del cómic balear, que pasado por diferentes momentos, y también a autores noveles que representan el presente y el futuro de este género”, afirmó.
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