Nombres como Frederick Peeters, Jean-Louis Tripp, Paco Roca o Yslaire se inscriben en lo que ya se conoce como “cómic de autor”, en el que las experiencias cotidianas e íntimasde los dibujantes son la base para la composición de sus historietas.
Peeters, de origen suizo, que se dio a conocer por su obra autobiográfica “Píldoras azules”, un relato de prospección psicológica, explicó en la conferencia titulada “Sentido y sensibilidad en el comic” cuáles eran sus motivaciones a la hora de realizar su trabajo.“Un dibujante se tira ocho horas al día sentado en su despacho, sin nadie con quien hablar. La única motivación que tiene es interior. Por eso tengo que tratar temas íntimos, cercanos a lo que estoy viviendo”, afirmó.
De forma similar se expresó el belgaYslaire, conocido por su obra “Sambre” y su trabajo multimedia “Cielo XX.com”, quien señaló que “dibuja porque es una forma de relacionarme y es por eso que abordo temas cercanos a mí”.
El español Paco Roca, que ha ganado el premio del 26 Salón Internacional del Cómic de Barcelona a la mejora obra y el mejor guión por “Arrugas” que aborda el Alzheimer y la demencia senil, también dice tocar temas que le preocupan personalmente.
“No sirve sólo hablar con los amigos. Me preocupan temas como la vejez de mis padres.
Dibujar sobre ello es como ir un poco al psicólogo, y de alguna forma me libero un poco del problema”, explicó.Tripp, que nació en Francia, y que es famoso, entre otras obras, por su serie “Almacén general”, que relata la crónica de un pequeño pueblo del Quebec, apuntó que desde que empezó a dibujar ha evolucionado, pues antes era más político y ahora ha decidido por abordar temas más personales.“Antes analizaba la sociedad desde arriba, ahora desde abajo, desde lo que le preocupa el ser humanos”, declaró.
Los ponentes también debatieron sobre la frontera entre los sentimientos y el sentimentalismo. Mientras Peeter y Yslaire opinaron que es difícil controlar lo que uno está contando, Tripp y Roca afirmaron que sí que se imponen límites para ofrecer una historieta más equilibrada. Todos, sin embargo, coincidieron que sean los lectores que ponga altura a sus sentimientos.
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